lunes, diciembre 26, 2005

Regalos Divinos

2005. Un año repleto de los más variados sentimientos, épocas sombrías, de definiciones tristes y alejamientos necesarios. Se parecía borrar lo que significaba vivir, y se daba paso a una rutina sin objetos de afecto, intelectual y deslavada .

Un año que me abrió los ojos ante una realidad que me desilusionó. Al darme cuenta de mi permanencia en una burbuja de hipocresía al por mayor, la honestidad de algunos me valió mucho más que todo el dolor que otros podrían llegar a causar. Desperté. Me sentí con derecho a hablar, a decir "¡Aquí estoy!" y patalear con más fuerza que nunca. Comencé a vivir.

Tiempo agotador, pero sin duda enriquecedor en términos de relaciones personales. Hice amigos de los de verdad, sin que lo buscara ni lo invocara, y así fue como cosas realmente lindas llegaron a mí. Me declaro poseedora de la magia de ver lo hermoso de la vida como nunca antes lo hice, y de amar tan repentina e intensamente como jamás pensé que podría llegar a hacerlo. Soy feliz.

Es Navidad, y me preocupé bastante poco por los regalos materiales. Hice pequeños obsequios con mis manos, compré sencillos objetos útiles y compartí agradables momentos de intimidad y familiaridad. Sin embargo lo más importante es que dí y recibí el más grande y divino regalo que puede existir: El Amor.

No nos dejemos llevar por el consumismo impuesto en una falsa fantasía comercial. Seamos capaces de ver las cosas que tienen real valor. Abracen a sus seres queridos, díganles cuanto los aman, y prepárense para volver a empezar. El 2006 se acerca, y mi intuición me dice que será increíble.

Dedicado a mi familia, a mis hermanas de corazón, a las niñas (Girl Power!), a mis verdaderos amigos y a Tí, "Como a la Vida Misma".

miércoles, diciembre 21, 2005

MonoSapiens: "Se Cayóoo?"

Hace algún tiempo me caí en la calle. Aún estaba en el colegio. Tras soltarse el cordón de un zapato, éste me dejó atrás al cruzar la calle mientras yo quedaba botada en el suelo. Pleno invierno, con las manos en los bolsillos, simplemente caí como un saco. Cinco personas corrieron a ayudarme, fueron demasiado amables, además que debí haber caido muy feo porque extrañamente nadie se rió.

Tiempo después me caí bajando una escalera en el metro. Esta vez una sandalia conspiró contra mi, dejándome el trasero dando tumbos justo en el ultimo escalón, a la vista del tren que ya estaba en la estación. Mientras yo sólo deseaba que el tren se fuera, el conductor me vio caer, abrió la puerta, se asomó... y me esperó! Me levante y medio coja llegué lentamente al vagón mas cercano, y una vez más, nadie se rió.

Hoy, la imagen fue diferente. El típico ejecutivo de terno oscuro, corbata y maletín en mano, que corre infructuosamente para alcanzar un tren que le cierra las puertas en las narices. Esta vez se encontraba solamente ingresando a la estación, pero corriendo de igual manera.

Un ruido sordo. Un "uuh" general. La imagen: el maletín intacto, y unos tantos escalones más abajo, el cuerpo retorcido y empolvado del intachable ejecutivo, quien también tiene su caidas en la vida. En el metro de nuestra ciudad estamos invadidos de carteles que nos solicitan "No Correr" y "Esperar el próximo tren que viene", pero el ejecutivo fue la muestra de otros tantos apurones-porfiados que no hacen caso y causan la proliferación de advertencias de este tipo.

Rodeado de mirones, el ejecutivo se levantó, cubierto de polvo y vergüenza, más sólo pudo sacase de encima lo primero. El se lo buscó. Nadie lo ayudó.

miércoles, diciembre 07, 2005

La Bruja Limón

Este término siempre causa risa en mis interlocutores. Pero no pude encontrar otro término que definiera de mejor manera el estado que muchas mujeres alcanzamos en ciertas etapas de nuestras vidas. Todas las mujeres, por muy dulces que nos veamos en apariencia, somos unas potenciales brujas que ante ciertos estímulos, salimos al ataque con maldiciones a diestra y a siniestra. Especialmente cuando se trata de maldecir al ex pololo.

Comencemos por definir los términos. La Bruja es aquella mujer que realiza maleficios con el claro propósito de perjudicar a su víctima. La Bruja Limón es la variante de la anterior que a mi parecer, representa a quien no sólo es bruja, sino además desagradable desde lo más profundo de su ser. En otras palabras, la Bruja Limón es esa mujer agria que incluye una intimidante y agresiva acidez en sus acciones y palabras.

Se me presentó hace poco la pregunta "¿qué se hace para quedar bien con el ex?". Yo no tengo la panacea, pero mi experiencia en relaciones amorosas me ha llevado a ver varias opciones al respecto.

A) Terminar mal, sin ver al ex-pololo nunca más: Una opción válida. Llorar un par de días, patalear y maldecir. Cuando te das cuenta de todo el tiempo que ha pasado desde la última vez que lo viste, ya se te olvidó todo y lo más probable es que el casual encuentro sea uno de esos en que tal vez correrías para saludarlo.

B) Terminar mal, y seguir viendo al ex-pololo por la vida social en común: Lleva inevitablemente a ser una Bruja Limón de tomo y lomo. Cada encuentro conlleva ofensivas sarcáticas, constante imposición de culpa en el otro y sobre todo, la auto-victimización de la bruja en cuestión.

C) Terminar bien: Lo más sano y recomendable. Conversar, carretear y llevar una vida normal sin peleas ni "sacadas en cara" (C.1). El único inconveniente es la constante tentación de volver debido al acostumbramiento o a la mutua soledad. En el último caso, existe una opción que no considera el volver a tener una relación pero sí "ciertas regalías" (C.2), lo que es bueno pero no deja de tener sus riesgos.

La clave es la comunicación. Su carencia causó las dos primeras opciones. La ultima fue precedida de una conversación honesta, abierta y tranquila. Saber escuchar al otro, entender sus razones y saber exponer las propias sin ofender ni mucho menos mentir. Siempre es mejor la verdad y una pataleta que una mentira piadosa y falsas expectativas.

Yo alguna vez fui Bruja, y Bruja Limón. Sardónica, agria a morir. Viéndolo desde afuera, fui bastante inmadura (y porqué no decirlo, "pendeja") en mi forma de actuar. Sinceramente yo me habría detestado, y mucho. Hay que saber aceptar las diferentes etapas y pensar que luego de un final viene un inicio, que casi siempre resulta ser mejor. Ahora, en esta nueva etapa de mi vida en que miro las cosas desde una perspectiva más amplia sigo siendo una Bruja, pues está en mi esencia de mujer, mas ya no hago maleficios... sino encantamientos.

martes, noviembre 29, 2005

Aislamiento Solteril

Patalera Invitada: Mari

Cuando Carlos y Camilla Parker se casaron supe que este año iba a ser extrañísimo. Porque la verdad es que esa historia no debió haber terminado en casorio. Debió haber terminado en la nada que estaba y convertirse en el romance jamás admitido / jamás asumido / jamás existido/ jamás oficializado más relevante en la historia del romance. Aunque sea para decir "Si! Estamos juntos y estamos tan felices que vamos a casarnos para que todos sepan y nosotros sepamos que nosotros como pareja existimos". Y así lo hicieron. Y por un lado las solteras felices, porque si eso era posible cualquier cosa era posible y por último, porque la limpieza de imagen y el asumir las situaciones sin importar que tan complejas sean siempre se agradece.

Y así todo el mundo empezó a casarse o a emparejarse o a embarazarse. Y claro todas las que seguimos solteras asumimos ilusamente que a nosotras también nos tocaba. Nuestro círculo más cercano comenzaba a encontrar la pierna que faltaba o derechamente el hombre de sus vidas y nosotras mirábamos con ansiedad y asombro, a ver cuando nos tocaba a nosotras. Pero han pasado casi 11 meses del año y no hay caso. Pero es que no hay caso. Y no se si será porque nuestras amigas acaparan la población masculina del país, o porque los hombres solteros andan escondidos o sabrá Dios que cosa, el punto es que no hay caso.

Y no sería tan malo, si una no se comenzara a sentir levemente aislada. Porque claramente las parejas son aparentemente el único tema de conversación interesante (y ni que decir inclusivo porque obvio que todos tenemos novio/a) y cuando se comentan las peripecias romántico-sexuales hay que recurrir a la experiencia con el último pololo, que aunque no fue mala, está más añeja que el cereal Fitness que uno compra para empezar bien la dieta el lunes. Porque el último pololo fue hace como 5 mil años. Y entre que se te olvida lo que pasaba, inventas historias para no quedar tan mal y terminas mintiendo (que es un pecado) para no quedar como una mamona y por último para tener algo que decir.

Y después, de a poco los carretes son en pareja, y obvio que es mejor que no vayas, porque somos numero impar y no hay nadie más soltero ( lo cual es casi tan grave como ir a una comida a una parrillada siendo vegetariano) así que mejor nos vemos todas las chicas solas el otro fin de semana. Ah no, mejor que el fin de semana después de ese porque en verdad es el cumpleaños del amigo del Braulio, y el domingo es el del su sobrino, así que mejor de ahí nos ponemos de acuerdo.

Y obvio que una termina sin carrete, porque el Sábado es sacrosanto para los pololos, y te vas aislando de a poco. Y después tus amigas tienen la patudez de preguntar "Pero por qué no sales con mas gente y te metes a otros círculos?"

PORQUE TODOS EN ESOS OTROS CÍRCULOS ESTÁN POLOLEANDO! Argh.

Agradecimientos miles por esta colaboración a Mari, una patalera más entre nosotros.

lunes, noviembre 07, 2005

Tejedores de Ilusión


No, no hablaré de La Ley. Sólo me pareció un título apropiado.

Días atrás hablé con Clo. Nos encontraríamos esta vez, además de la excusa de la venta por catálogo, porque el otro lado del teléfono me decía "¡¡¡Tengo que contarte algoooo!!!". Cuando tu mejor amiga de toda la vida te dice que quiere contarte "algo", siempre es importante, y sobre todo íntimo. Lo sé porque luego de mi "primera experiencia", lo primero que pensé fue en llamarla. Ella intuitivamente (y con la ayuda de mi exaltado tono de voz) supo la razón de mi llamada. Esta vez, yo también lo supe.

Si bien no era el mismo evento, también se trataba de una experiencia importante en la vida de Clo. Había conocido a un hombre, ambos se habían amado en sólo un par de días y parecía que aún seguían haciéndolo, a pesar de estar (por ahora y quien sabe cuanto tiempo más) separados por miles de kilómetros.

Escuché atentamente, pensándola una anécdota más. Sin embargo, un par de días después, Clo compartió conmigo algo que sólo pensé, según ciertas normas y roles sociales, le correspondía a las mujeres. Él aún no podía olvidarla y las líneas que le escribió, cargadas de pasión y romanticismo me provocaron una ligera nostalgia. Es verdad que sólo han pasado pocos días, pero muchas veces ni siquiera dentro de una misma ciudad un amor fugaz perdura más de un par de horas. Mi respuesta a eso fue "es amor a primera vista".

¿Existirá realmente el amor a primera vista, o es que acaso mi amiga sólo vive una ilusión, una fantasía?

Muchas veces pensamos y nos auto-convencemos de estar enamorados, y luego de meses de autoflagelación aguantando a un pelotudo que a la fuerza hemos pintado como maravilloso, nos damos cuenta que hemos estado perdiendo el tiempo. Es definitivamente más saludable ilusionarnos ante la frágil y efímera imagen de un poeta Centroamericano, hombronazo lleno de fuego, aún sabiendo que volverá a su lugar de origen, si en unos días ese hombre es capaz de hacer sentir (o creer) a una mujer que el verdadero amor existe.

Tantas veces hemos tejido ilusiones, para otros tanto como para nosotros mismos. Y qué más da, si gracias a ellas experimentamos la felicidad que la realidad muchas veces nos niega. Amiga mía, toma el mate y el tejido mágico, y vive esta fantasía al máximo ya que nunca sabemos cuando nuestras fantasías pueden hacerse realidad.

Gracias por todo. Incluida la foto.

miércoles, noviembre 02, 2005

"Even Enemies Can Show Respect"

Frase tomada de la película "Troya". Un rey abatido por la muerte de su hijo es capaz de echarse al hombro su orgullo y besar las manos del hombre que tomó la vida de su primogénito. Su único es que su enemigo le devuelva el cadáver de quien fuera su sangre, sólo para poder sepultarlo con los honores que se merece.

Las palabras que encerré entre comillas se me grabaron profundamente. Me significaron la expresión de nobleza más absoluta. Los enemigos son enemigos las 24 horas del día, los 7 días a la semana; pero eso no significa que no exista respeto y cordura en una relación de odio y beligerancia. El hecho de ser enemigos no implica necesariamente empuñar la espada permanentemente. Hay momentos en la vida para odiar, para amar y para respetar la tan ansiada paz aunque sea un minuto.

¿Cuánta gente nos topamos día a día, que si bien no utilizamos la palabra "enemigos" por su severidad, decimos eufemísticamente que "no nos cae bien"? ¿Cuántas veces hemos volteado la mirada ante un saludo, sin afecto pero cordial, sólo porque la persona que nos saluda no nos agrada? ¿Cuántas veces hemos negado nuestra ayuda, aún estando al alcance de nuestras manos, sólo para dejar que ese ser que no ocupa un lugar privilegiado en nuestros corazones se caiga aún más fuerte?

Incluso los enemigos pueden mostrar respeto. Una frase simple, pero profunda y que evoca a la reflexión pública e introspectiva. Aún aquellos individuos que no pierden oportunidad para odiarse y desearse la mutua muerte pueden hacer una tregua y mostrar como es que los seres humanos nos diferenciamos de los demás animales. Si ellos pueden hacerlo, nosotros aún más.

martes, octubre 04, 2005

Verde de Envidia


¿Como se sentiría usted si a su lado, frente a la caja de un negocio, una persona encuentra 2o mil pesos y luego de verificar la inexistencia del dueño, guarda en su bolso tan preciado botín?

Sí. Debo reconocer que por primera vez en mi vida sentí envidia de la más cochina. De esa que imagina golpeando al suertudo con tal de arrebatarle su tesoro. Decidí que lo mejor era canalizar positivamente mi tan mala energía. Intenté ponerme en el lugar de quien había perdido su dinero, que para muchos nos significa el disponible para todo un mes.

Sentí pena y alegría. Extraña pero posible combinación. Pena por quien perdió su dinero, alegría por quien lo encontró y también por mí, que si bien no había ganado, no había perdido nada y eso me daba cierta tranquilidad.

El pensamiento de "todo pasa por algo" resulta beneficioso en estos casos. Pensé que, aun estando a mi alcance, el que mi compañera hubiera encontrado el dinero significaba que ella lo necesitaba más. Si yo lo hubiera encontrado, probablemente se habría perdido en cosas inútiles que no compraría con mi propio dinero, y la pérdida de otro habría sido totalmente en vano.

Mis regalos divinos se acercan más a las cosas que alegran el espíritu, en vez de aquellas que alimentan debilidades (in)humanas. A mi no llegan billetes, pero sí un helado gigante en un reencuentro amistoso o una moneda de $500 en un paradero de micro, justo cuando las monedas escasean. El dinero puede comprar mucho, pero muchas veces los verdaderos buenos momentos se ven acompañados tan sólo de una humilde tostada con mantequilla y un té con bolsita compartida.

Luego de mi autoconvincente reflexión, decidí que no necesitaba el dinero venido del suelo. Extrañé las cosas realmente importantes, y dediqué unas horas para mi descanso. Cuando desperté, sólo tenia hambre de pan en vez de ambición y avaricia injustificada. Me sentí bien.

Pero a pesar de todo... ¡habría sido tan rico que yo encontrara esas 20 lucas!

lunes, septiembre 26, 2005

Hoy será un gran día...

Hoy será un gran día... Hoy será un gran día... Mantra recomendado a Karen por su esposo, ante sus recurrentes ataques de fatiga matinal y el hastío cotidiano. Es que al parecer la predisposición positiva tiene buenos resultados en la práctica.

Últimamente me he sentido muy cansada y aburrida de todo. Siento un fulminante deseo por dejar todo de lado y hacer algo que de verdad me haga feliz, pero descubro con frustración que debo esperar un buen rato para poder hacerlo. Tal vez es esa misma frustración y hastío la que hace que cada día sea inmensamente insufrible y eterno, y lo mejor será que haga caso al consejo del sabio marido.

Día sábado. Dispuesta a salir de la rutina latera, salí positivamente de mi casa para encontrarme con Karen. Ella, también se había levantado con esa idea. Dos mentes positivas al ataque, fueron capaces de lograr lo que jamás pude imaginar. Luego de un rico y decente helado, recibir cual regalo caído del cielo, una copa de las más gigantes que hay... ¡completamente gratis!

Dos mentes positivas, un helado gigante de regalo... dos mujeres con ataque de risa, buscando la cámara escondida mientras el resto de la gente en la heladería miraba como quien mira bichos raros. Es que en una cuidad estresada y gris, las risas abundan más en la boca de los tontos que en la de los realmente felices.

Mi felicidad duró todo el día, y aún más. Me sentí con la energía para leer un libro y disfrutarlo como no lo hacía desde que empecé a estudiar Literatura. Lamentablemente el sueño acabó, y apenas me vi enfrentada nuevamente a las responsabilidades cotidianas me convertí en una mujer agria y cansada. Entonces recordé el mantra, y cambié una tarea de mala calidad por una película vanidosa y de igual reputación. Y al final que importa, si de todas maneras, ¡mañana será un gran día!

lunes, septiembre 12, 2005

Una Cita con Don Güeón Barsa

El sábado pasado, conocí a Don Güeón Barsa. Ícono máximo, portador del estandarte, de la guaripola y la imagen corporativa o "sersimbol" oficial del gremio.
La primera imagen de DGB me provocó un ligero shock: pantalones ajustados, chaqueta de cuerina, camisa blanca abierta dejando entrever el pectoral selvático y una aturdidora nube de colonia For Men (2x$990). Yo trato lo mas posible de evitar los prejuicios, por lo que olvidé la imagen y me dispuse a pasar un buen rato.

A los escasos minutos de habernos conocido, DGB comenzó a afilarse los colmillos, con un exceso de confianza abrumador que lo llevó a aventurar comentarios sobre mi vida privada, familiar y sentimental, con nulo acercamiento a la realidad. Yo era la invitada, por lo que debia "mantener la compostura con el protocolo", aunque no me faltaron las ganas de "ir al baño" y agarrar el primer taxi que pasara por el lugar.

Me tocó soportar una serie de viejos clichés como el brazo apoyado en el respaldo del asiento, tras mi cuello; tener al tipo gritando cada vez más pegado a mi oído; escuchar más de 10 veces "eres muy bonita, eres muy especial, yo busco una mujer como tú, estoy con una mujer que me tiene aburrido..."; hasta me preguntó de qué color eran mis ojos, ¡¡cualquiera puede notar a simple vista que son cafés!! Y ninguno de mis artificios de mujer pedante-hasta-morir eran efectivos contra su carácter incansablemente meloso, cargante y pegote.

El eterno minuto en la pista de baile me convirtió en la Reina del Aerobox. Si sacaba mis brazos y mis manos empuñadas del frente, era acorralada, y DGB se llevó más de un discreto "mangazo". Tres horas me parecieron una eternidad, tras múltiples peticiones telefónicas y solicitudes para conocerme mejor que continuaron hasta en el auto de regreso a casa, donde tampoco pararon las bromas simples, fomes y de mal gusto. Más encima, luego me enteraría de que su pobre primo tuvo que cargar con todos los gastos. Es decir, un Güeón Barsa de tomo y lomo.

Nunca había extrañado tanto mi casa, ver a mis papás y jugar con mi perrita. Lo peor de todo es que el tipo sí se llevó mi número.

PD: Luego de un tiempo comprobaría lo que su primo me advirtió, DGB jamás llamó.

Dedicado a la Dra. Necrobeat

sábado, septiembre 10, 2005

"¿Que te pasa, güeón barsa!"

Esa frase es lo primero que se me viene a la mente cada vez que enfrento a un hombre que abusa apenas una mujer da una pizca extra de confianza. Esta clase de tipos que "se toman el codo", el brazo, y todo lo que está adherido a él en cuanto una les da la mano se merecen todo mi repudio.

El confianzudo, o "Güeón Barsa" por lo general es un tipo cobarde, que jamas da la cara y muchas veces, ni siquiera su verdadero nombre. Se esconde tras pantallas, cables telefónicos, cafés y/o copetes al paso, titilantes lucecitas de neón, entre otros. Es de los típicos que "lanza la piedra y esconde el brazo", como muchos que toquetean culos en la calle mientras se mimetizan con la masa del Paseo Ahumada. Debo revelar que mi peor experiencia de ese tipo fue en una calle solitaria por parte de un cobarde en bicicleta que luego de alzarme con un tremendo agarrón que dejó mi glúteo (no recuerdo cual) morado, desapareció rápidamente. (Menos mal que ahora los castigarán.. aunque cómo los encontrarán seguirá siendo un misterio sin resolver)

La tecnología ha ayudado sin duda a que estos individuos detestables proliferen. Sobre todo gracias a Internet. No falta el pelotudo que luego de una extensa y destapada conversación (que casi siempre se inclina hacia tópicos de índole sexual), apenas sabiendo el nombre de su interlocutora intentan sobrepasarse con ella. No dudo que existan personas que accedan inmediatamente, y debo reconocer también que he sido muy confiada. El hecho anterior me ha convertido en una persona cada vez más desconfiada y reticente, a pesar de que eso no esté en mi naturaleza ingenuo-agüeonada de hija única y protegida.

Afortunadamente, si bien los casos experimentados por quien les habla son remarcables, no son abundantes. Aún creo que el mundo allá afuera está lleno de hombrecitos adorables, el problema es que a ellos no les gusta demostrarlo como a nosotras las regalonas, nos gustaría. Así es que por ahora muchas gracias, a aquellos pelotudos barsas, por hacernos pensar a muchas mujeres que una gran parte del género masculino vale bien poco la pena.

viernes, septiembre 09, 2005

Hoy Me Declaro MALA ONDA

Hoy me declaro MALA ONDA

Por todos aquellos que sonríen cuando quieren mandar a la mierda a todo el mundo.

Por aquellos que viven su vida siguiendo pautas que otros concibieron como las 'normales'.

Porque ya estoy cansada de tanto cinismo.

Porque estoy aburrida de que todos aquellos con quienes estoy o 'casi todos' traten de cumplir metas que no son las suyas.

Porque estoy cansada de que todo en este mundo se trance en el mercado de valores, incluso el cariño.

Porque me siento ahogada por todo y por todos.

Porque me aburrí de las mismas conversaciones, los mismos temas, de los mismos rollos.

Porque es hora de desconectarme y ver toda esta tontera desde arriba.

Y por último, porque ser mala onda es de los más IN que hay... No, eso último es broma.

Agradecimientos a Cuática

viernes, agosto 26, 2005

Olor a Desesperación

Recordé de pronto un comercial cuyo lema era "Las mujeres huelen tu desesperación". Ante mi experiencia, que no está libre de situaciones anecdóticas de las cuales es mejor reirse, creo que es verdad. Además, es un tema recurrente en los Clubes de Lulú que cada vez que un tipo se pone cargosito o insistente con respecto a expresar sus pasiones hacia una mujer, ésta se siente inmediatamente espantada y huye lo más rápido que puede.

No sé si la desesperación tiene olor a algo, y si lo tuviera me costaría más olerlo hoy, porque estoy muy resfriada, pero definitivamente hay algo en las mujeres que nos hace concordar con esta sensación. Llamémosle Sexto Sentido, pero del tipo "I see desperate people", quienes pensándolo bien, no están tan lejos de ser dead.

Ahora, ¿pasará lo mismo con los hombres? ¿Acaso se sentirán incómodos ante la presencia de una fémina deseosa de tener un encuentro íntimo-amoroso con el primer pelotudo que se le cruza sólo porque se le da la gana? Lo dudo.

Hace unos minutos, Clo me comentó que estaba aburrida. Quería hacer algo nuevo, necesitaba un cambio. Cada vez que tocamos el tema surge la idea de lanzarse a la vida. Ser una mujer dispuesta a todo, una "vil perra" q toma a los hombres como un juguete que luego desecha.

¿Que pasaría? ¿Olerían los hombres nuestro propósito apenas nos vieran llegar? Y si fuera así, ¿huirían? Hay muchos hombres que se muestran cancheros y atrevidos, hasta que les sale una mujer guerrera al camino... se cohíben y huyen para tomarse una cerveza con sus amigos y contarles que se "atinaron a la tremenda miiiiiina". Aunque sea en sus sueños.

Gracias a la Dra. Necrobeat por su respuesta sobre las hembras desesperadas.

sábado, agosto 20, 2005

Esperando... Nada?

El lunes recibí una grata llamada, era una de mis amigas de infancia quien me avisaba que el viernes sería su titulación (¡Quién como ella!). Su motivación no era sólo esa, sino que además quería compartir ese tan importante momento con dos de sus mejores amigas, Marce y Clau. Se me pidió pasar el aviso a la otra amiguita en cuestión y fui despedida con un "yo te aviso".

Ayer fue viernes, Marce y Clau se reunieron de todas formas, pero ese "aviso" jamás llegó. Nuestros corazones anhelaron brindar por Coté, pero no nos quedó más que hacerlo por las buenas ofertas del último folleto de Avon.

Hay un dicho muy sabio que dice que los amigos son como los libros, pocos pero buenos. Y mi opinión concuerda con él. Soy una persona de pocos amigos y muchos conocidos, y si bien de los conocidos no espero nada, de los amigos espero mucho. A veces demasiado.

Es que para mi no parece algo tan difícil ser leal y cumplir con ciertos compromisos. En estos tiempos frívolos la palabra de honor parece haber perdido su valor. Y tal vez soy una abuela en el cuerpo de una joven que sigue esperando y confiando ciegamente en las personas.

Afortunadamente no estoy sola en esto, hay gente q piensa también como yo. Claudita, cuando llegue el pedido nos reiremos juntas de nuevo.

sábado, julio 30, 2005

Todo de Nuevo...

Ultima semana de julio, hace frio... aún así, nos vamos a la playa.Algunos se van un fin de semana con un poco de dinero en el bolsillo y se disponen a gastarla en lo mismo que la gastarían si estuvieran en la ciudad. La idea es cambiar de aire, salir de la rutina aunque sea en el lugar.Yo, me voy una semana completa, a una casa fría, pero donde un corazón cálido me espera.

Eso es mejor que cualquier carrete con cambio de aire. El corazón cálido esta cansado, los años pasan y la energía no es la misma. Un saco de carbón, un brasero y un buen mate recomponen la fuerza perdida, pero el remedio mas poderoso es la compañía y el amor. Así los males parecen desaparecer con los besos, los abrazos, las risas y la gallina de campo.Es lo bueno de tener a la abuelita en la playa, en vez de "la casa de la playa".

La casa de la playa no siente, no ama, no rabea, no tira caca a los nietos descarriados, no lanza chistes libidinosos a la nieta que ya no es una niña, así como tampoco hace pantrucas ni tortillas de rescoldo. Y el día en que la abuelita no esté, esa playa seguirá significando algo más para mí.Es que ir la playa no es necesariamente sinónimo de exponer cuerpos al sol, se se secan y oscurecen como cochayuyos.

Mientras estoy sentada y mi perrita salchicha corre libre con una felicidad desbordante, puedo darme cuenta.El mar, contiene una fuerza poderosa, que transmite con sólo mirarlo. Luego de un semestre de trabajo, tan sólo sentarse en la arena contemplando el ir y venir de las olas, me devuelve las fuerzas.Y la brisa, sentirla revolear mi cabello con sus manos frías y fuertes, me despiertan, me renuevan, y me preparan para volver a empezar...